En el norte de Rosario, Refinería marca el ritmo gastronómico de la ciudad
Los hermanos Avalle inauguraron Refinería restaurant, en el año 2008, en la esquina de Don Orione y Rawson, un rincón enclavado en un barrio con profunda historia, que se convirtió en el lugar perfecto para plasmar su visión gastronómica, que conjuga tradición y cocina de autor.
Las Malvinas, también conocido como Refinería, ha experimentado una transformación notable, albergando en la actualidad lujosas torres de condominios junto a las antiguas casas que caracterizaban al barrio obrero. En el pasado, este lugar solía ser hogar de fondas, bares y almacenes de ramos generales. Ubicado al norte de Rosario, el barrio creció hacia fines de 1800 en torno a la primer fábrica de Refinería de Azúcar en la Argentina y a los talleres del ferrocarril Central Argentino. Fue uno de los primeros barrios obreros de la ciudad y el rol de la Refinería era el eje laboral del barrio, porque allí se procesaba todo el azúcar que llegaba en tren desde los ingenios tucumanos, y que luego salía en barco para su exportación.
“Se trata de una vieja casa de típica morfología rural, con rejas rectas, puertas ciegas con trancas y seis habitaciones contiguas”, explica el chef Carlos Avalle, que pasó por las cocinas de Anabella, Da Castaldo, Cibo y Park Hyatt.
Reciclada y restaurada, Refinería restaurant conserva la esencia de una casa y su entorno, creando un ambiente cálido y acogedor que se refleja en su decoración vintage con empapelados, luces suaves, cuadros antiguos y un patio con ladrillos a la vista y utensilios antiguos colgados. Esta estética se traduce en la propuesta culinaria a través de sus platos y carta de vinos.
Refinería restaurant, una cocina que eleva los sabores
En los últimos años, Refinería restaurant ha impregnado toda su identidad en cada creación de su carta. Un recorrido por sus platos confirma por qué el restaurante figura en las listas de los mejores lugares para disfrutar de una comida en la ciudad.
Para empezar como entradas se pueden pedir empanadas criollas y salteñas; mollejas con laca cítrica, kale y papines; provoleta ahumada con vegetales asados; langostinos grillados con mayonesa de lima y crocante de boniato; ensalada tibia de camembert y peras caramelizadas. Entre las pastas, hay opciones de raviolis de hongos y mozzarella con manteca de hierbas; Cavatelli con albóndigas de cordero; Tagliatelle carbonara; Tortellini de tomate, burrata y parmesano con tomate fresco. Entre los platos principales, la cocina ofrece Pesca del día y Chateaubriand de lomo con crema de papa y ajo negro. La especialidad de la casa son las brasas, con Tira de 13 costillas, ojo de bife, pacú con salsa criolla; chorizo puro cerdo; matambre de cerdo; mollejas y provoleta tradicional. Todo se puede acompañar con papas gajos, puré, ensaladas, papas rústicas al romero y Pimientos, berenjenas y tomates asados.
Entre los postres, Strudell de pera especiado con helado; Volcán de dulce de leche con crema helada; Creme Brulëe de vainilla; Mousse de chocolate amargo, frutas frescas y oliva y Flan de coco con salsa de dulce de leche.
La carta de vinos es muy amplia con muchas etiquetas de bodegas de Chardonnay, Rosados, Espumantes, Sauvignon blanc, Champagnes, Malbec y Dulces.
Refinería transmite esa pasión por la gastronomía, logrando crear un espacio donde disfrutar comidas sabrosas e inolvidables, en un barrio cargado de identidad e historia, que aprecia el ritmo pausado de tiempos pasados.⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀
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